
Guía para identificar el gaslighting, la forma de abuso emocional que quizá te aplicaron y no lo sabías
¿Alguna vez has expresado tus emociones y la situación empeora? Es verdad que todos tenemos límites diferentes así como una forma de percibir el mundo distinta a los demás, pero eso no significa que tus emociones no sean válidas, y hay una forma de abuso emocional que se caracteriza por dejarte con ese sentimiento de que estás exagerando o no debiste haber dicho lo que sentías, aquí te contaremos más.Mucho se habla actualmente sobre la salud mental y las famosas “red flags”, que son signos de alerta que debes detectar en tus relaciones personales, sean amistosas, familiares, laborales o de pareja; y tienen como finalidad el identificar a través de ciertas acciones si esa compañía o esa relación te está perjudicando más de lo que te beneficia, ¿te suena?.
Pues una de esas red flags, que es súper importante de identificar, es si alguna persona con quien convives invalida tus emociones, tu percepción, constantemente busca hacerte sentir que “exageras” a través de frases como “deja de hacer drama”, “estás loco/a”, “no fue para tanto”, etcétera. Este tipo de invalidación sobre tus emociones, es una forma de abuso emocional que se conoce como gaslighting e implica muchas técnicas de manipulación.
El nombre surge de una película llamada de esta forma Gaslighting que salió en 1940, y básicamente la historia cuenta la vida de una pareja en la cual, él comienza a ejercer este tipo de violencia hacia ella. Cambiando y alterando cosas en su hogar, como bajar la intensidad de la luz, y cuando ella se percata de cada situación o alteración, él lo niega y la hace dudar de su percepción.

Básicamente, en eso consiste esta forma de manipulación o abuso emocional: el manipulador hace menos las emociones de la víctima, cuestiona constantemente su percepción al grado de lograr que la misma víctima dude de sí misma y de lo que ve o siente, por lo que es incapaz de identificar que está en una relación abusiva.
Te compartiremos algunos signos de alerta que podrían ayudarte a identificar si estás en una relación (del tipo que sea) en donde se ejerce gaslighting. Aunque también, recordemos que el amor propio es reconocer nuestros errores y mejorar, así que esta guía te podría ayudar a identificar si acaso eres tú quien ejerce este tipo de abuso emocional hacia alguien más, y es momento de poner manos a la obra y trabajar para ser una mejor persona y construir relaciones más sanas:
Negar que algo sucedió
Con frases tipo “¡eso nunca pasó, estás recordando mal!” Por poner un ejemplo, el manipulador busca que la víctima dude de sí misma. Así si hubo algún incidente violento o acción de abuso y la víctima lo recuerda, el manipulador lo desacredita asegurando que no fue así.
Minimizar las emociones ajenas
“¡Es que todo lo tomas personal!”, “lo que pasa es que eres muy sensible” o “no aguantas nada” , a través de frases parecidas, la intención que tiene el manipulador es invalidar y minimizar la emoción de la víctima, así esta se volverá incapaz de validar sus propias emociones, por lo que será más sencillo tolerar abusos.
Hacer creer a la víctima que está loco/a
Lamentablemente, en discusiones es muy común que una persona le diga a la otra que sus facultades mentales son menores o incluso, que padece algún trastorno. Esto es una forma de violencia porque se desacredita por completo la percepción y emociones de la víctima, partiendo de la premisa de que no cuentan porque “está loco/a” o no se le debe tomar en cuenta porque es una persona irracional. Es común que el manipulador busque convencer a quienes los rodean, como amigos, compañeros y familiares de que la víctima padece de sus facultades mentales.
Culpar a la víctima de la reacción del abusador
“Ya sabes que eso me molesta”, “tú fomentas que te trate así”, son un ejemplo de frases que el abusador usa para que la responsabilidad de un problema y de su propia reacción, recaigan en la víctima. Entonces, la reacción del abusador no es el problema en sí, sino culpa de la víctima por haberla “provocado”, lo cual es sumamente violento.
Lamento que eso te lastimara/ lamento que lo malinterpretaras
Este tipo de frases, aunque suenen como una disculpa ¡no lo son!, pues quien cometió el error no asume ningún tipo de responsabilidad, más bien se “disculpa” de que la víctima haya sido quien lo tomara así. Esto es una forma de invalidar la percepción y emociones de la víctima, dejándola incluso con la sensación de que recibe una disculpa que no merece.

Recuerda que si identificas alguno de estos comportamientos en cualquiera de tus relaciones personales, no tienes por qué permanecer ahí. Si algo no te hace sentir bien, el “aguantar” no es una cualidad para lograr que alguien permanezca a tu lado, y si tú mismo no validas tus emociones y percepción, difícilmente alguien más lo hará. Escúchate, conócete y recuerda que vales mucho.
¡Cuéntanos aquí! ¿Has experimentado una situación como las que describimos? ¿Si identificas que eres tú quien ejerce alguno de estos comportamientos, estás dispuesto a reconocerlo y mejorar?
Si eres víctima de alguna forma de abuso emocional, psicológico, económico o físico, no olvides que hay líneas de apoyo para brindarte asesoría, da click aquí para conocer algunas.