.jpg)
La importancia de iniciar una rutina de skincare si aún no la tienes
Una rutina es una costumbre que no deberías pensar mucho en adoptarla, pues una vez que lo hagas será parte de tus hábitos y será más sencilla llevarla a cabo. Y como la piel está expuesta a muchos factores del ambiente, uno de esos hábitos podría ser cuidarla y apapacharla, lo cual tiene muchos beneficios que te vamos a contar.SProbablemente ya has escuchado el término “rutina de skincare” que, en español, es rutina de cuidado de la piel. Pero quizá no sepas qué implica tener una rutina y lo más importante, por qué deberías tenerla entre tus hábitos diarios como lo son cepillarte los dientes, lavar tu cabello o incluso alimentarte de cierta forma. Te adelantamos que tener tu rutina de skincare es muy fácil y no requiere de mil pasos para iniciar, al contrario, te puede tomar unos cuantos minutos y es más sencillo de lo que imaginas.
A diario estamos expuestos a muchos contaminantes del ambiente, así como a los rayos UV que provienen del sol o de fuentes artificiales; además hay cambios dentro de tu organismo producidos por emociones, hormonas, cambios en tu rutina o en tu alimentación. Todo ello se ve reflejado en cómo luce tu piel, y seguramente alguna vez te has visto al espejo y detectas que algo te hace falta para lucir como te gustaría, y puede que se trate del aspecto de tu piel.
La piel es el órgano más grande del cuerpo, así que te imaginarás la cantidad de beneficios que tiene cuidarla adecuadamente y cómo va a impactar no solo en cómo luces, sino en cómo te sientes contigo mismx.
¿Qué es una rutina de skincare?
En resumen una rutina de skincare es una serie de pasos, que van en un orden específico, y ayudarán a cuidar de tu carita. Existen distintos tipos de rutinas, sin embargo, la más básica consta de tres pasos: limpieza, hidratación y protección solar.
1. Limpieza: Sirve para remover las impurezas que hayas acumulado en tu rostro, ya sea durante la noche o después de tus actividades diarias, por lo que la limpieza se debe realizar dos veces al día. Aquí puedes leer todo sobre limpiadores faciales.
2. Hidratación: Seguramente después de bañarte o lavar tu rostro sientes la piel algo estirada o seca, la hidratación es para resolver este problema, además de que ayuda a la piel a resistir mejor a los contaminantes del ambiente. Aquí podrás leer más sobre este paso.
3. Protección solar: Este es EL paso que no puedes omitir, pues los rayos UV dañan mucho a la piel, y protegerla del sol no es una opción sino una necesidad por tu propia salud. Aquí te contamos más sobre lo importante que es usar protección solar.
Necesidades específicas y rutinas más completas
Ahora que sabes los pasos de una rutina básica, apta para cualquier tipo de piel, debes saber también que tu piel es diferente a la de cualquier otra persona, por lo que conforme identifiques algunas necesidades específicas que tu piel requiere podrás complementar y personalizar tu rutina facial.
Para empezar a detectar tus necesidades, lo principal es conocer qué tipo de piel tienes, y si resuelves este quiz te ayudaremos a identificarlo, y a continuación te dejamos información específica sobre los diferentes tipos de piel:
Una vez que lo sepas, podrás añadir a tu rutina productos para necesidades más específicas, pues cada tipo de piel requiere cuidados especiales, aquí te contamos más.
Por último debes saber que dentro del inmenso mundo del skincare existe una variedad de ingredientes y productos que se adaptan a tus tipo de piel, necesidades y presupuesto. Cada una de estas opciones tiene beneficios diferentes, y aquí puedes conocer más al respecto.
¿Cuál es tu rutina ideal de skincare?